El primer año que un adolescente tiene carné de conducir es uno de los más peligrosos de su vida: los accidentes de tráfico son la principal causa de muerte entre los adolescentes en Estados Unidos.
Por eso, Oregón puso en marcha hace más de una década el programa Graduated Driver's License (GDL). Algunas de las normas que afectaban a los conductores menores de 18 años incluían:
- Los conductores noveles deben acumular 50 horas de experiencia al volante y realizar un curso de seguridad vial antes de examinarse para obtener el permiso intermedio. Alternativamente, pueden registrar 100 horas de conducción supervisada.
- Durante los 6 primeros meses, un conductor adolescente no puede llevar a ningún pasajero menor de 20 años (a menos que sea un familiar directo).
- Durante los segundos 6 meses, el conductor no puede llevar más de 3 pasajeros menores de 20 años.
- Durante el primer año, no se puede conducir entre medianoche y las 5 de la mañana, salvo contadas excepciones.
Ahora, los programas de educación vial de Oregón están entre los mejores del país, y los conductores adolescentes son mucho más seguros.
Sin embargo, aún hay margen de mejora en la GDL.
En primer lugar, después de conducir durante seis meses, un adolescente puede llevar legalmente hasta 3 pasajeros adolescentes en el vehículo. Sin embargo, el riesgo de mortalidad de un conductor joven se cuadruplica cuando lleva tres pasajeros menores de 21 años, en comparación con la conducción sin pasajeros adolescentes. ¿Deberían mantenerse las restricciones de pasajeros hasta los 18 años?
Además, los adolescentes que hicieron un curso de seguridad al volante además de sus 50 horas de conducción tuvieron menos accidentes que los que hicieron 100 horas de conducción con sus padres. ¿Es probable que los niños estén aprendiendo prácticas de conducción poco seguras de adultos que no son buenos conductores o que el número de horas conducidas esté siendo rellenado por padres cansados?
La implementación del GDL, aunque no siempre popular, ha hecho que los adolescentes sean mejores conductores y ha hecho que las carreteras sean más seguras para todos nosotros. Espero que podamos seguir liderando el camino hacia unos adolescentes seguros en Oregón.
