El uso del teléfono móvil es peligroso y provoca accidentes de tráfico y muertes por negligencia, según un grupo nacional de seguridad que aboga por la prohibición total del uso del teléfono móvil mientras se conduce. El grupo, National Safety Council, afirma que debe prohibirse tanto el uso de teléfonos portátiles como de manos libres. Janet Froetscher, presidenta del grupo, ha comparado el uso del teléfono móvil con la conducción bajo los efectos del alcohol, ya que multiplica por cuatro las posibilidades de accidente.
"Los estudios demuestran que conducir mientras se habla por el móvil es extremadamente peligroso y multiplica por cuatro el riesgo de accidente", afirma la doctora refiriéndose al examen de los registros realizado en 1997 por el New England Journal of Medicine.
California y Washington, junto con otros cuatro estados, han prohibido el uso del teléfono móvil en la mano mientras se conduce, pero ningún estado lo ha prohibido aún por completo.
Froetscher afirma que los teléfonos móviles manos libres son tan peligrosos como los que se sostienen con la mano. "No se trata solo de lo que haces con las manos, sino de que tu cabeza está en la conversación y, por tanto, tus ojos no están en la carretera", afirma Froetscher.