Con la bajada de las temperaturas y el comienzo de la temporada de lluvias, el noroeste se convierte en un lugar más peligroso para los ciclistas.
Las hojas mojadas, el hielo negro y la lluvia o la nieve frecuentes no ayudan a las condiciones de conducción de los ciclistas, ni de los conductores.
Conducción en invierno 101
- Los ciclistas tienen derecho a estar en el carril de circulación. No circulan por él para molestarte o ralentizar tus desplazamientos. Durante los meses de invierno, es probable que eviten el carril bici por el hielo o los montones de hojas mojadas.
- Utilice el intermitente para que los ciclistas -y los demás vehículos- sepan a dónde se dirige. Esto debería ser algo natural para los conductores seguros.
- Déjales espacio. Las carreteras mojadas son más peligrosas para las bicicletas que para los coches, y la lluvia o la nieve prolongan la distancia de frenado tanto de una bicicleta como de un coche. Deja un poco más de espacio cuando sigas o adelantes a un ciclista.
- Recuerda que se enfrentan a los mismos factores que afectan a tu forma de conducir -baches, vías de tren, coches que giran sin señalizar-, pero estas cosas son mucho más peligrosas cuando vas en bicicleta.
- No toques el claxon ni grites a un ciclista. Los ciclistas están concentrados en su trayecto: tocar el claxon puede asustarles mucho. Si necesitas alertar a alguien de tu presencia, basta con un ligero toque de claxon.
La Alianza para el Transporte en Bicicleta ofrece excelentes consejos para ciclistas, como planificar una distancia de frenado más larga, reducir la presión de los neumáticos y depender menos del freno delantero.
Conduce con seguridad. Conduce con seguridad.
Imagen: Rawich / FreeDigitalPhotos.net