A principios de este mes, Johnson & Johnson, junto con su proveedor de talco, una unidad de Imerys SA, fueron condenados a pagar 37 millones de dólares en concepto de daños compensatorios por las alegaciones de que un residente de Nueva Jersey contrajo cáncer por utilizar productos de talco que contenían amianto. Una semana después de este duro golpe a los gigantes de la industria, las empresas fueron condenadas a pagar 80 millones de dólares más en concepto de daños punitivos.
Steven Lanzo, de 46 años, declaró que estuvo expuesto al amianto por inhalación de polvo de talco para bebés durante 40 años. En 2016 le diagnosticaron mesotelioma, una forma agresiva de cáncer que se desarrolla en los pulmones, el abdomen o el corazón como consecuencia de las fibras de amianto. Aunque el talco en sí no es peligroso, a menudo se extrae cerca del amianto, que provoca la peligrosa forma de cáncer.
Durante el juicio, los abogados que representaban a Johnson & Johnson argumentaron que el mesotelioma de Lanzo podría haber sido causado por otras fuentes, incluida una casa de la infancia que tenía tuberías envueltas en amianto. La empresa sostuvo que sus productos no son cancerígenos y que nunca han contenido trazas de fibras de amianto.
Sin embargo, al término de los dos meses de juicio, el jurado declaró a Johnson & Johnson responsable del 70% de los daños y al proveedor de talco responsable del 30% restante. El veredicto sobre los daños compensatorios se emitió rápidamente, en el primer día completo de deliberaciones del jurado. Lanzo fue indemnizado con 30 millones de dólares, mientras que su esposa recibió otros 7 millones. Apenas una semana después, el jurado ordenó a las empresas pagar 80 millones de dólares más a Lanzo.
En una declaración recogida por Reuters, el abogado de Lanzo declaró tras el veredicto que "estamos satisfechos de que se haya hecho justicia y de que nuestros clientes reciban una compensación justa." Johnson & Johnson, sin embargo, siguió negando las acusaciones de Lanzo y afirmó que el talco para bebés no contiene amianto ni provoca cáncer. USA Today informó de que, en una declaración corporativa emitida tras el veredicto sobre los daños compensatorios, Johnson & Johnson se mostraba "decepcionada" por el veredicto, pero se reservaba más comentarios hasta que el caso hubiera concluido. La empresa también indicó que tiene previsto apelar el veredicto.
El veredicto de Nueva Jersey es la primera derrota de Johnson & Johnson en un juicio por contener amianto. La empresa se enfrenta actualmente a más de 6.000 demandas por cáncer de ovario en numerosos estados del país. Muchas de las demandas se basan en que la empresa no advirtió a las mujeres del riesgo de desarrollar cáncer de ovario al utilizar sus productos para la higiene femenina. El caso de Lanzo puede abrir un segundo frente en el litigio sobre si los productos de talco de la empresa suponen una amenaza para la salud de los consumidores.
Aunque la U.S. Food and Drug Administration vigila los posibles problemas de seguridad de productos cosméticos como los polvos de talco, actualmente no existe ninguna normativa que prohíba que el talco contenga amianto. Por lo tanto, gran parte de los litigios, tanto ahora como en el futuro, se basarán en que las empresas no advirtieron debidamente a sus consumidores.
