Mientras viajaba en un vuelo de la aerolínea Virgin America de San Francisco a Boston, Rómulo Valdez, de 93 años, murió de una parada cardiorrespiratoria. Ahora su familia, incluida su hija que iba a bordo del vuelo, demanda a la compañía aérea por negligencia del personal.
Según el Chicago TribuneNicette Balukjian y su padre, Romulo Valdez, viajaban en un vuelo nocturno para asistir a una reunión familiar. El Dr. Valdez padecía una enfermedad que le obligaba a llevar una botella de oxígeno durante el viaje y llevaba un marcapasos. A mitad del vuelo de cinco horas, el Dr. Valdez despertó a su hija y le pidió la botella de oxígeno.
Cuando la Sra. Balukjian sacó la botella del compartimento superior, su padre dejó de reaccionar. Se esforzó por conectar los tubos de oxígeno a la nariz de su padre y apenas recibió ayuda de los auxiliares de vuelo. Aproximadamente 15 minutos después de conectar la botella de oxígeno, el Dr. Valdez dejó de respirar. En ese momento, el auxiliar de vuelo preguntó si había algún médico en el avión y se ofreció a permitirle utilizar el suministro de oxígeno del avión.
El Dr. Valdez fue trasladado a un asiento de primera clase, donde los auxiliares de vuelo y un estudiante de medicina empezaron a practicarle compresiones torácicas. Se le aplicó una descarga con un DEA, pero ninguno de estos métodos fue eficaz.
La Sra. Balukjian pensó que el piloto haría aterrizar el avión debido a la emergencia médica, pero le dijeron que realizaría su aterrizaje programado en Boston en media hora. El Dr. Valdez recibió una manta, pero su cara quedó al descubierto.
Cuando el avión aterrizó, se le dijo a la Sra. Balukjian que permaneciera sentada mientras los demás pasajeros desembarcaban. Los pasajeros se quedaban boquiabiertos y le daban el pésame a su paso. No había ninguna ambulancia ni equipo de emergencia esperando para asistir a la familia o llevarla al hospital más cercano cuando por fin pudieron salir.
La Sra. Balukjian esperó en el puente del avión a que llegara el personal médico durante "lo que pareció una hora". Un forense dictaminó más tarde que el Dr. Valdez había muerto a las 6:09 de la mañana, la hora a la que aterrizó el avión.
La familia ha presentado una demanda en la que alega que la aerolínea cometió abusos contra ancianos al no atender las necesidades básicas del Dr. Valdez. También alega que la compañía aérea fue negligente y causó angustia emocional a la Sra. Balukjian. La demanda solicita una indemnización por daños y perjuicios superior a 75.000 dólares. La Sra. Balukjian también está trabajando para cambiar la política de la aerolínea sobre aterrizajes de emergencia cuando un "pasajero anciano con oxígeno está en apuros médicos". Considera que su padre no recibió la atención que esperaba.
