Una investigación federal ha revelado que no se realizaron los cálculos necesarios para el diseño del puente de la autopista interestatal 35W de Minneapolis (Minnesota), que se derrumbó el 1 de agosto de 2007 y causó 13 muertos y 145 heridos. La empresa de diseño utilizó placas de acero de tamaño inadecuado en el diseño del puente, lo que contribuyó al derrumbe, según señaló la Junta Nacional de Transporte en su informe final. El informe también culpaba a las autoridades de Minnesota y federales de negligencia por no haber revisado adecuadamente el diseño durante las inspecciones de los daños en las placas que se habían producido antes del accidente.
Es posible que, incluso después de esta tragedia, los actuales procesos estatales y federales de revisión del diseño sean incapaces de detectar los defectos de diseño. En el informe, el Consejo Nacional de Transportes propuso nueve recomendaciones a la Administración Federal de Carreteras y a la Asociación Americana de Funcionarios de Carreteras y Transportes Estatales. Las propuestas incluían recomendaciones sobre la mejora de la formación de los inspectores de puentes y el refuerzo de la supervisión gubernamental de los contratistas de diseño para detectar los problemas antes de que provoquen accidentes devastadores.
