Anteriormente publicamos en nuestro blog la decisión del Tribunal Supremo de los Estados Unidos en el caso Philip Morris contra Williams sobre la procedencia de una indemnización punitiva de 79,5 millones de dólares a la familia de un fumador de Oregón. Desde el punto de vista procesal, la decisión anterior del Tribunal Supremo de los EE.UU. devolvió el caso al Tribunal Supremo de Oregón para que reconsiderara y reevaluara su decisión anterior de que las garantías procesales no exigían que un tribunal de primera instancia diera una determinada instrucción al jurado solicitada por el demandado, a saber, que instruyera al jurado de que NO debía utilizar una indemnización por daños punitivos para castigar a un demandado por daños causados a personas que no eran parte en el litigio.
El 31 de enero de 2008, el Tribunal Supremo de Oregón emitió un nuevo dictamen en el que reconsideraba y reevaluaba la cuestión planteada por el Tribunal Supremo de los EE.UU., y concluía que la instrucción del jurado propuesta por el demandado era defectuosa por otras razones que no identificó en su dictamen anterior. Por lo tanto, reafirmó su conclusión anterior de que el tribunal de primera instancia no se equivocó al negarse a dar la instrucción.
La semana pasada, el Tribunal Supremo de EE.UU. anunció que revisará por tercera vez la sentencia de 79,5 millones de dólares por daños punitivos contra Philip Morris. En esta ocasión, los magistrados examinarán únicamente si el Tribunal Supremo de Oregón ignoró en esencia la sentencia anterior del Tribunal, y no si la cuantía de la sentencia es constitucionalmente admisible.
Los alegatos están previstos para otoño. Mantendremos informados a nuestros lectores de la evolución del caso.
